MINISTRO DEL AMBIENTE PIDE PRUDENCIA EN DESALOJO DE PÓMAC

El ministro del Ambiente, Antonio Brack, pidió a la Policía Nacional ser prudente en el desalojo de las familias ubicadas en el Santuario Histórico de Bosque de Pómac a fin de que se eviten consecuencias lamentables, sin embargo solicitó firmeza en las incursión policial toda vez que ocupan ilegalmente esta reserva natural y cultural.

“Hemos coordinado con la policía y el desalojo será con suma prudencia, pero sí con firmeza. Se han tomado las medidas preventivas para no tener consecuencias negativas, la intervención no será en un día sino de manera progresiva”, precisó.

Esta mañana, en su visita al santuario Bosque de Pómac, el ministro Brack hizo un llamado a los invasores a abandonar voluntariamente el espacio que por años han ocupado, trasgrediendo la ley.

“Los invasores no tiene futuro en el bosque, hemos realizado los trámites correspondientes según establece la Constitución, se ganaron todos los juicios en las diferentes instancias y tendrán que salir. Les pido con amabilidad que salgan de la zona”, refirió Brack Egg.

Aclaró que estas familias no obtendrán ningún título de propiedad, no se regularizará su situación, no tendrán apoyo del Estado y siempre tendrán problemas porque habitan en un espacio que conserva la cultura y naturaleza de la región, del Perú y del mundo.

“Vamos a recuperar las últimas cinco mil hectáreas de algarrobo que quedan, no serán destruidas para que sean aprovechadas sosteniblemente por las generaciones futuras”, mencionó.

Asimismo, rechazó las versiones sobre la entrega de la reserva natural, una vez recuperada, a empresas transnacionales para su explotación, ya que solo buscan incitar a los invasores a fin de que permanezcan en el interior del bosque.

“Una vez recuperado el bosque se procederá a la reforestación de las hectáreas devastadas por el uso agrícola. Las comunidades instaladas tradicionalmente en los alrededores del santuario serán quienes aprovecharán racionalmente las bondades del bosque en actividades complementarias como la apicultura, artesanía, ganadería en menor escala y el turismo, señaló Antonio Brack.

Alertó que “de ocurrir un acontecimiento lamentable será responsabilidad de quienes incitan a las familias a quedarse, por eso no hay que escucharlos”.

A primera hora el ministro Antonio Brack Egg entregó al jefe regional de la Polcía, José Ubaldo Aliaga, el primer lote de materiales, como carpas y bolsas de dormir, que serán empleados por los efectivos en la incursión programada por orden judicial para el próximo 20 de enero.

Posteriormente se dirigió al santuario, ubicado en el distrito de Pítipo de Ferreñafe, acompañado del gerente de Recursos Naturales, Juan Sandoval Valdivieso; el director del Museo Nacional de Sicán, Carlos Elera; y el jefe del Santuario Bosque de Pómac, Vicente Cortes.

En el lugar dialogó con los guardaparques, a quienes les pidió su colaboración en esta tarea disuasiva para conseguir la salida de voluntaria de los invasores.

“Con ustedes impulsaremos la apicultura, artesanía y el turismo. Vamos a capacitar a los jóvenes para que trabajen como guías turísticos, solo así lograremos conservar el bosque”, puntualizó.

Luego recorrió parte del santuario y observó el enorme algarrobo llamado “árbol milenario”, comprobando la real importancia de salvaguardar este recinto, caracterizado por el algarrobo, otras especies arbóreas típicas de la costa norte del Perú, así como por guardar los restos arqueológicos de la cultura Sicán.

MINISTRO DEL AMBIENTE PIDE PRUDENCIA EN DESALOJO DE PÓMAC

El ministro del Ambiente, Antonio Brack, pidió a la Policía Nacional ser prudente en el desalojo de las familias ubicadas en el Santuario Histórico de Bosque de Pómac a fin de que se eviten consecuencias lamentables, sin embargo solicitó firmeza en las incursión policial toda vez que ocupan ilegalmente esta reserva natural y cultural.

“Hemos coordinado con la policía y el desalojo será con suma prudencia, pero sí con firmeza. Se han tomado las medidas preventivas para no tener consecuencias negativas, la intervención no será en un día sino de manera progresiva”, precisó.

Esta mañana, en su visita al santuario Bosque de Pómac, el ministro Brack hizo un llamado a los invasores a abandonar voluntariamente el espacio que por años han ocupado, trasgrediendo la ley.

“Los invasores no tiene futuro en el bosque, hemos realizado los trámites correspondientes según establece la Constitución, se ganaron todos los juicios en las diferentes instancias y tendrán que salir. Les pido con amabilidad que salgan de la zona”, refirió Brack Egg.

Aclaró que estas familias no obtendrán ningún título de propiedad, no se regularizará su situación, no tendrán apoyo del Estado y siempre tendrán problemas porque habitan en un espacio que conserva la cultura y naturaleza de la región, del Perú y del mundo.

“Vamos a recuperar las últimas cinco mil hectáreas de algarrobo que quedan, no serán destruidas para que sean aprovechadas sosteniblemente por las generaciones futuras”, mencionó.

Asimismo, rechazó las versiones sobre la entrega de la reserva natural, una vez recuperada, a empresas transnacionales para su explotación, ya que solo buscan incitar a los invasores a fin de que permanezcan en el interior del bosque.

“Una vez recuperado el bosque se procederá a la reforestación de las hectáreas devastadas por el uso agrícola. Las comunidades instaladas tradicionalmente en los alrededores del santuario serán quienes aprovecharán racionalmente las bondades del bosque en actividades complementarias como la apicultura, artesanía, ganadería en menor escala y el turismo, señaló Antonio Brack.

Alertó que “de ocurrir un acontecimiento lamentable será responsabilidad de quienes incitan a las familias a quedarse, por eso no hay que escucharlos”.

A primera hora el ministro Antonio Brack Egg entregó al jefe regional de la Polcía, José Ubaldo Aliaga, el primer lote de materiales, como carpas y bolsas de dormir, que serán empleados por los efectivos en la incursión programada por orden judicial para el próximo 20 de enero.

Posteriormente se dirigió al santuario, ubicado en el distrito de Pítipo de Ferreñafe, acompañado del gerente de Recursos Naturales, Juan Sandoval Valdivieso; el director del Museo Nacional de Sicán, Carlos Elera; y el jefe del Santuario Bosque de Pómac, Vicente Cortes.

En el lugar dialogó con los guardaparques, a quienes les pidió su colaboración en esta tarea disuasiva para conseguir la salida de voluntaria de los invasores.

“Con ustedes impulsaremos la apicultura, artesanía y el turismo. Vamos a capacitar a los jóvenes para que trabajen como guías turísticos, solo así lograremos conservar el bosque”, puntualizó.

Luego recorrió parte del santuario y observó el enorme algarrobo llamado “árbol milenario”, comprobando la real importancia de salvaguardar este recinto, caracterizado por el algarrobo, otras especies arbóreas típicas de la costa norte del Perú, así como por guardar los restos arqueológicos de la cultura Sicán.