DÍA INTERNACIONAL DE LA PAZ

Cada año, el 21 de septiembre, se celebra el Día Internacional de la Paz en todo el mundo. La Asamblea General de la Organización de las Naciones Unidas (ONU), ha declarado esta fecha como el día dedicado al fortalecimiento de los ideales de paz, a través de la observación de 24 horas de no violencia y alto el fuego, en los países en conflicto, así como a conmemorar los ideales de paz de cada pueblo y cada nación. Y para ello hay que trabajar para el desarrollo social y económico de los pueblos, en muchas facetas: pobreza, hambre, salud, educación, cambio climático, igualdad de género, agua, saneamiento, electricidad, medioambiente y justicia social.
Este año en particular nos ha demostrado que no somos enemigos el uno del otro, que la llegada del SarsCov2, a fines del año pasado, diseminándose al mundo entero en el 2020, esclareció que nuestro enemigo común es un virus que amenaza nuestra vida, salud, y seguridad. El COVID-19 ha llevado a nuestro planeta a la agitación, incertidumbre, tristeza, destruyendo medios de vida, exacerbando los ánimos, y nos ha recordado por la fuerza lo susceptibles y frágiles que podemos ser.
Hoy más que nunca se necesitan sectores y generaciones unidas, para ganar esta nueva lucha contra la peor crisis de salud pública de nuestro tiempo. El temor a enfermar, morir, la incertidumbre frente a un cambio, la tensión de las relaciones en espacios reducidos, son elementos que nos pone ante un desafío de poder poner en práctica valores, actitudes, que nos ayuden a transformar la desesperanza en optimismo, convertir la crisis en oportunidad y luchar juntos ante esta contingencia del COVID19.En medio de esta contienda sanitaria, llegamos al Día Internacional de la Paz, cuyo tema central este año es: "Forjando la paz juntos", en la que TU VOZ, es más importante que nunca, en estos tiempos difíciles de distanciamiento físico, aun así, debemos trabajar juntos en pro de la paz, fomentar el diálogo, reforzar la unidad familiar, el respeto, y la solidaridad.
Se hace necesario que en medio de esta tormenta y dentro de este dolor que asola el mundo, construyamos una cultura de paz bajo los principios universales de unidad, universalidad, justicia, verdad, equidad; fomentando de esta manera Instituciones Educativas, familias, comunidades, medios de comunicación, empresas, Instituciones gubernamentales, más sólidas. Y que en tiempos como los actuales redunde en una sociedad más empática, siendo el núcleo el amor, y dar un nuevo significado a la vida, todo ello propiciará un cambio, un mundo más constructivo, justo, equitativo y sostenible.
No menos importante es desarrollar y fortalecer nuestra resiliencia para proyectar un futuro y legado a nuestras nuevas generaciones, ayudar a sanar nuestro planeta y cambiarlo para mejor. Que sea un Día Internacional de la Paz, difundiendo compasión, amabilidad y solidaridad frente a la discriminación, el odio, la indiferencia. Aunque no podamos estar uno al lado del otro, aún podemos prepararnos para un nuevo amanecer con optimismo y esperanza.
Obstetra:Ada Chicoma Sotomayor.

DÍA INTERNACIONAL DE LA PAZ

Cada año, el 21 de septiembre, se celebra el Día Internacional de la Paz en todo el mundo. La Asamblea General de la Organización de las Naciones Unidas (ONU), ha declarado esta fecha como el día dedicado al fortalecimiento de los ideales de paz, a través de la observación de 24 horas de no violencia y alto el fuego, en los países en conflicto, así como a conmemorar los ideales de paz de cada pueblo y cada nación. Y para ello hay que trabajar para el desarrollo social y económico de los pueblos, en muchas facetas: pobreza, hambre, salud, educación, cambio climático, igualdad de género, agua, saneamiento, electricidad, medioambiente y justicia social.
Este año en particular nos ha demostrado que no somos enemigos el uno del otro, que la llegada del SarsCov2, a fines del año pasado, diseminándose al mundo entero en el 2020, esclareció que nuestro enemigo común es un virus que amenaza nuestra vida, salud, y seguridad. El COVID-19 ha llevado a nuestro planeta a la agitación, incertidumbre, tristeza, destruyendo medios de vida, exacerbando los ánimos, y nos ha recordado por la fuerza lo susceptibles y frágiles que podemos ser.
Hoy más que nunca se necesitan sectores y generaciones unidas, para ganar esta nueva lucha contra la peor crisis de salud pública de nuestro tiempo. El temor a enfermar, morir, la incertidumbre frente a un cambio, la tensión de las relaciones en espacios reducidos, son elementos que nos pone ante un desafío de poder poner en práctica valores, actitudes, que nos ayuden a transformar la desesperanza en optimismo, convertir la crisis en oportunidad y luchar juntos ante esta contingencia del COVID19.En medio de esta contienda sanitaria, llegamos al Día Internacional de la Paz, cuyo tema central este año es: "Forjando la paz juntos", en la que TU VOZ, es más importante que nunca, en estos tiempos difíciles de distanciamiento físico, aun así, debemos trabajar juntos en pro de la paz, fomentar el diálogo, reforzar la unidad familiar, el respeto, y la solidaridad.
Se hace necesario que en medio de esta tormenta y dentro de este dolor que asola el mundo, construyamos una cultura de paz bajo los principios universales de unidad, universalidad, justicia, verdad, equidad; fomentando de esta manera Instituciones Educativas, familias, comunidades, medios de comunicación, empresas, Instituciones gubernamentales, más sólidas. Y que en tiempos como los actuales redunde en una sociedad más empática, siendo el núcleo el amor, y dar un nuevo significado a la vida, todo ello propiciará un cambio, un mundo más constructivo, justo, equitativo y sostenible.
No menos importante es desarrollar y fortalecer nuestra resiliencia para proyectar un futuro y legado a nuestras nuevas generaciones, ayudar a sanar nuestro planeta y cambiarlo para mejor. Que sea un Día Internacional de la Paz, difundiendo compasión, amabilidad y solidaridad frente a la discriminación, el odio, la indiferencia. Aunque no podamos estar uno al lado del otro, aún podemos prepararnos para un nuevo amanecer con optimismo y esperanza.
Obstetra:Ada Chicoma Sotomayor.